Kike no sabía
muy bien como hacerte otro homenaje más, y he decidido poner algo sobre ti en
mi blog.
Aquí te dejo una carta que escribí cuando me entere del trágico
suceso, que no me creo aun, y más viéndote el día de antes preparado con la
mochila con rumbo a preparar las marchas del campamento
Querido Kike:
Tus ojos y tus labios se han cerrado para siempre, también tu
sonrisa que continuamente te acompañaba.
Cuanto te hemos querido y te seguimos queriendo.
Nos has demostrado día tras día tu gran fuerza, vitalidad y
entrega a los demás.
Nos has enseñados a tirara para alante gracias tu regla de las
tres "C".
Seguro que con tu familia habrás sido un hijo ejemplar, un hermano
y primo maravilloso... ellos al igual que nosotros orgullosos están de ti.
Además creo que todos nosotros, debemos dar gracias a Dios por haber
conocido a una persona como tú y ten claro Kike que tu vivo estas en nosotros,
gracias por haberte cruzado en nuestro camino.
Eres grande Kike y se que en Pirineos crecerá algún árbol en tu
honor
Te Quiero amigo
De tu amiga Ortega (que tu fuiste el que conseguiste que
todo el mundo me llamase Ortega y no Laura, pero nadie me lo dirá igual que tu)
No hay comentarios:
Publicar un comentario